jueves, 14 de enero de 2010

Somachigún




Y aquí el muy clásico....muy profesional....

miércoles, 6 de enero de 2010

Yo soy Ajax

Pues parece que en la mitología, en la Illiada aparecen dos Ajax o Ayax en la guerra de Troya.


Ajax el Menor

De este no tenemos ni mención en la película pero vamos a recordarlo un poco porque en el clásico si que tiene su importancia y la verdad es que es un personaje.


Ajax el Menor fue un guerrero mítico que participó en al guerra de Troya. Debía de ser también de baja estatura y aunque valiente, también era fanfarrón, arrogante y pendenciero.

Era hijo de Oileus, rey de Locris y fue el líder del destacamento de este reino durante la batalla.
Destacó en la guerra antes de la llegada de Aquiles y fue uno de los guerreros que se introdujo dentro del caballo y aguardó hasta estar en el interior de Troya para internarse en el palacio real y asesinar al rey Príamo.
Pero en el camino para dar muerte al rey se encontró con Cassandra, que debía de estar muy buena y estaba refugiada bajo un altar dedicado a la diosa Atenea. Ajax no tuvo la más mínima misericordia pese a los ruegos y la clemencia que ella imploraba y la violó alli mismo, bajo el altar de la diosa.

Atenea, diosa de la sabiduría, la estrategia y la guerra justa, enloqueció de ira por el ultraje y con ayuda de Poseidón, dios de los mares y los océanos, hacen que la nave de Ayax naufrague durante la tempestad que dispersa a la flota griega en su regreso a la patria.
Sobrervivió a la tormenta y tras pasar un tiempo inconsciente tumbado en las rocas despertó sabiendo que la tormenta fue provocada por Poseidón para castigarle por sus pecados y no se le ocurrió otra cosa al compañero pues que burlarse del dios de los mares diciéndole que por más esmero que hubiese puesto no había conseguido matarle. Y este ya con un cabreo de cuidado, le arrojó un tridente que le causó la muerte, atravesándole el pecho y ensartándolo en la roca, matándole al instante.
En el momento en que el alma de Ajax lo abandonó, el tridente y su cuerpo se transformaron en piedra y allí se quedaron, como una roca alta que sobresale de las aguas del mar Egeo para el resto de los días.


Un figura este Ajax, no aparece en la película pero se podría hacer una con él.....enano, fanfarrón, pendenciero, asesino, valiente eso si, violador, profanador, bufándose de los dioses...vamos, y encima le hacen una estatua que permanece por siempre jamás en el Egeo.



Ajax el Grande

Por otro lado, tenemos a Áyax I, hijo de Telamón, rey de Salamina, primo de Aquiles, que también se dirigíó a la mítica batalla de Troya al mando de 12 navíos.


El clasicote gigante de la película.



Fue criado y entrenado, al igual que su primo Aquiles por el centauro Quirón y se convirtió en un guerrero alto y corpulento de una fabulosa fuerza, el más valeroso después de su primo Aquiles y que se embarcó a la guerra de Troya al mando de doce navíos de su tierra, Salamina.

Peleó en la guerra con coraje y destreza. Fue un guerrero de gran estatura, fuerza colosal y testarudo. En la batalla mandaba su ejército y luchaba con un enorme escudo y una gran hacha.
No fue herido en ninguna de las batallas relatadas en la Ilíada y es el único personaje que no recibió ayuda por parte de ninguno de los dioses griegos, fue el único héroe que debía todos su triunfos a su ser humano.
Luchó con Héctor en dos ocasiones. La primera fue en un duelo que duró todo un día sin que hubiera un vencedor y la segunda fue durante una incursión de los troyanos en el campamento de los aqueos cuando ambos pelearon en los barcos griegos. Áyax dejó casi muerto a Héctor arrojándole una piedra mayor que el propio príncipe troyano. Ambos encuentros tuvieron lugar cuando Aquiles había abandonado el campo de batalla debido a su enfado con Agamenón y los griegos estaban desolados.



Aquí vemos la pelea en la película entre Ajax y Héctor.




Héctor mata a Ajax, pero en el clásico no es así y Ajax sigue siendo un gran héroe.


A la muerte de Patroclo a manos de Héctor, los troyanos intentaron hacerse con su cuerpo y alimentar con él a los perros, pero Áyax luchó y logró proteger el cadáver, devolviéndolo al campamento griego y a su amigo Aquiles.

Mas tarde, cuando Aquiles muere tras ser alcanzado por una flecha de Paris, Áyax y Ulises pelean por recuperar el cuerpo del héroe griego y enterrarlo junto al de su amigo Patroclo.
Por cierto que ninguno de los dos Ajax, ni en Menor, ni el Grande, se llevaban bien con Ulises.
Finalmente, junto a Hermes y Atenea logra enterrar el cuerpo de su primo.

Tras el funeral de Aquiles, de nuevo Ajax y Ulises reclaman la armadura de Aquiles como recompensa por sus esfuerzos. Finalmente parece que porque Agamenón intercedió por él, Ulises recibe la armadura y Áyax furioso cae al suelo. Cuando se levanta, estaba enloquecido de furia y en su delirio confunde un rebaño de ovejas con los líderes, Ulises y Agamenón, matando a todos los animales. También parece que Atenea misma intervino creando la confusión y el delirio de Ajax, ya que no le debió de gustar que es de los pocos que no va al combate implorando alguna protección divina.

Cuando Áyax despierta de su locura, ve que ha deshonrado su espada de guerrero con sangre de animales domésticos y decide quitarse la vida antes que vivir en la vergüenza y el oprobio. Para ello utiliza la espada de Héctor, que éste le había entregado como un ofrenda de honor tras su primer duelo.

Y por esta rata es por quien me has abandonado

Nadie recordará tu nombre

La inmortalidad es vuestra, cogedla

El salto

Vaya vaya que grande es el Peter Garret este, que además de no ser un gran escalador, se las compone para dar un saltito sobre los 7.000 metros de altitud cogiendo carrerilla esprintando un poco, pero por supuesto sin dejar de lado la seguridad y para ello se pone el casquito, no vaya a ser que falle y al caer por el precipicio se de un golpecito en la cabeza.

Menos mal que por lo menos se le altera un poco la respiración.



Una guía realizada por un montañero que ha aprendido todo lo que sabe de escalada gracias a Hollywood. En este caso un vídeo con intrucciones en clave irónica basadas en Límite vertical.

Por encima de los siete mil es el límite vertical

El Límite Vertical es la altura a partir de la cual el cuerpo humano no puede prácticamente sobrevivir.
El aire es muy frío, no hay casi oxígeno y respirar se hace muy difícil. Los que lo han experimentado dicen que es como llevar una almohada contra la cara. Cada paso dado en estas condiciones resulta dificultoso.

Y si, además de todo esto, se está escalando el K2, la segunda montaña más alta del mundo, la aventura puede tornarse tremendamente peligrosa.
Los escaladores profesionales sienten un gran respeto por el K2. Posee la reputación de ser uno de los picos más peligrosos del mundo porque no existen senderos de fácil tránsito en la ruta hacia su cima. Es escarpado por todas sus caras y el clima es impredecible.

Lo llaman "La Montaña Salvaje".

El limite vertical para la habitabilidad humana ronda los 5.000 metros de altura. A medida que nos alejamos del nivel del mar, la concentracion de oxigeno va disminuyendo de forma muy considerable. A mas de 5.000 metros ya no tenemos oxígeno suficiente para que nuestro metabolismo trabaje correctamente y se pueden producir trastornos neurologicos y trastornos respiratorios como edemas pulmonares. Son todos los males que se dan en la altura.
Otro gran factor que se sufre además de la presión atmosferica es principalmente la temperatura. A esas alturas podemos tener temperaturas de hasta 35 ºc bajo cero.

El místico montañero Montgomery Wick le explica claramente a Peter Garret que está por encima del límite vertical.



Ahí arriba no se muere..., se está muerto

El excéntrico, solitario y místico montañero Montgomery Wick hace esas apariciones en plan viejo de la montaña.
Mientras le van contando cosas, él va soltando frases-respuestas apocalípticas y ambiguas. Respondo y vuelvo la cabeza como que ya no hay nada mas que decir o me voy para hacerme aún mas interesante.
De esa manera todos siempre se quedan ahí pensando lo que ha dicho como si fuese algo super importante.


sábado, 2 de enero de 2010

Quid pro quo

La definición que nos da la RAE de "quid pro quo" es que es una locución que proviene del latín y que significa literalmente "algo a cambio de algo".

Eso es lo que le ofrece Hannibal el canibal a Clarice Stearling, él le cuenta lo que ella quiere y ella le contará a él lo que él quiere escuchar de su vida.

Y oye chillar a los corderos

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