lunes, 3 de septiembre de 2012
¿Se puede saber qué haces morralla inútil?
Grond es un ariete de cien pies de longitud que se balanceaba sobre unas cadenas poderosas, y rematado por una cabeza de lobo enfurecido forjada en negro acero. Disponía también de una cobertura ignífuga.
Recibió su nombre en recuerdo al Martillo Infernal, la gran maza de Morgoth con la que luchó contra Fingolfín, era llamada también el Martillo de los mundos subterráneos.
Fue forjado en Minas Morgul y tiene un impresionante aspecto: la cabeza de lobo tiene las fauces entreabiertas, y a través de los dientes se ve fuego en el interior.
Grond era arrastrado por unas enormes bestias, bueyes de las cavernas, que tiran de él. Está custodiado por orcos, para los que es como un semidios, y es manejado por trolls de las montañas.
En el asedio a Minas Tirith es hora de traer a Grond, la cabeza de lobo, cuando uno de los capitanes orcos sentencia que nada puede derribar esas puertas. Gothmog, el lugarteniente de Minas Morgull, ordena entonces a sus soldados: "¡Traed la cabeza de lobo!".
Todos los orcos gritan a una el nombre del ariete como heavy metals en un concierto de los Iron Maiden.
Con la ayuda de un hechizo del Rey Brujo de Angmar, y los sortilegios utilizados al forjarlo en Mordor, Grond destruyó las formidables puertas de Minas Tirith en sólo tres embestidas. Al tercer golpe, las puertas volaron por los aires en medio de un relámpago mágico, y cayeron rotas en mil pedazos.
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