El honor se halla en el fin, no en los medios

Así debe de acudir una familia decente una preciosa mañana de domingo para ir a misa, celebrar la eucaristía y disfrutar de las bendiciones del Señor, la companía de las demás famlias decientes del pueblo y de las castañas del sacerdote.....pero hoy es algo diferente, el sermón lo va a dar el simpático coronel William Tavington...


...que les espera en la entrada de la casa del Señor para recibirles cordialmente....



Pero que malo que es el coronel de los Dragones Verdes, una pasada, un villano cruel, implacable y con una determinación brutal que no duda en meter a un pueblo entero dentro de una iglesia y dar la orden de quemarla después, je, je....las caras del resto de los Dragones lo dice todo, je, je..ninguno quiere, se hacen pequeños dragoncitos, pero el coronel es tan malo que no puede haber duda.
La maldad del coronel un 9 sobre 10 sin duda, ja, ja..sólo el Diablo podrá ser un 10 sobre 10, recordemos a cierto personaje profesor de nuestra infancia, Dios el 10, yo soy 9´5 y a partir de ahí vosotros, ja, ja...
La magnífica frase del honor, suena a que cualquier medio es bueno para coseguir el fin, le va bien al amigo Tavington.

Pues este personaje está basado en una persona real que por supuesto según unos era un villano ya que de verdad luchó en la guerra de independencia de los Estados Unidos y claro, para los colonos era lo peor de lo peor...para los ingleses en cambio fue un héroe, llego a general y fue nombrado sir, ja, ja... cada uno barre para su casa.